El Niño Deportista
El sistema músculo-esquelético del niño crece y se modela por:
- Factores hereditarios (genes)
- Factores nutricionales (alimentación)
- Factores mecánicos ( fuerzas que interactúan en el hueso
, modelan y orientan las articulaciones )
- Factores endocrinos (hormonas)
El deporte (en el niño es sinónimo de juego) es la actividad física más saludable para el normal desarrollo y crecimiento del niño. Controlar que el gesto deportivo, que modelará su sistema músculo- esquelético, no sea repetitivo o unilateral es muy importante en las etapas de crecimiento.
Así lo ideal sería realizar varios deportes y no solo uno es una buena manera de que el esqueleto del niño no se adapte a una sola actividad.
¿TENEMOS UN FUTURO DEPORTISTA?
Un aumento de las cargas de entreno en un niño en crecimiento puede provocar efectos nocivos en su sistema osteomuscular; sobrecargas en huesos y articulaciones, patología insercional (tensón –hueso), etc.…
Antes de practicar un deporte de forma intensiva es necesario realizar una valoración médico deportiva y podológica.
El deporte debe ser genérico, equilibrado y adaptado al las diferentes etapas de crecimiento y maduración del niño.
EL NIÑO NO ES UN ADULTO PEQUEÑO (Aristóteles)
DEPORTE & ENTRENAMIENTO
El entrenamiento físico regular, estimula el desarrollo de todos los órganos y sistemas ( desarrollo físico-psíquico), además mejora significativamente su fuerza, potencia aeróbica, habilidad básica
y la coordinación.
La activiad física regular no solo es buena sino también necesária.
VALORACIÓN PODOLÓGICA
El estudio podológico consiste en la valoración global de la extremidad inferior (morfológica), control biométrico y análisis estático y dinámico del pie mediante sistemas que cuantifican la huella plantar; distribución plantar de las cargas, centro de presiones y progresión de las presiones plantares durante la marcha o gesto deportivo.
CALZADO DEPORTIVO
Cada deporte tiene su calzado en función del gesto deportivo, superficie de juego y tipo de pie.
El calzado tiene que adaptarse al pie, no solo en su forma sino en su función y además ayudarlo en el gesto deportivo.
Un calzado inadecuado al deporte, superficie de juego o a la forma del pie puede ser fuente de sobrecargas y lesiones, a veces a distancia del pie (rodilla o cadera).
Se debe prestar atención al sistema de sujeción (cordón) y al tipo de calcetín.
Copyright © Jose A. Macón Hernangómez